Caminar para aprender y trabajar mejor


Las personas que van caminando a estudiar o trabajar tienen una mejor productividad en su tarea, ya que el hecho de trasladarse a pie hace que mejore su nivel de rendimiento y aprendizaje cognitivo.
Esto es especialmente recomendable cuando se trata de niños o adolescentes ya que mejora el nivel de atención selectiva y aprendizaje a la hora de estudiar.
Veamos como se llegó a esta conclusión.



Estas son las conclusiones a las que ha llegado una investigación conjunta entre las universidades de Zaragoza y Madrid.
Los niños y adolescentes que caminan para ir a su centro de enseñanza tienen una mejor capacidad cognitiva que quienes lo hacen en algún medio de transporte (auto, metro, autobús, etc.). Además, aquellos que tardan 15 minutos o más en llegar caminando a sus centros educativos también presentan un mayor rendimiento cognitivo que quienes viven cerca y demoran menos en llegar caminando.

Es muy importante saber que cuanto mayor sea el trayecto recorrido más considerables son los beneficios obtenidos. También es interesante aclarar que, en general se han visto mejores resultados en personas del sexo femenino que masculino.

Uno de los mejores resultados que se observó en toda la investigación era el aumento considerable de la “atención selectiva” de los participantes.
La atención selectiva es la capacidad que tenemos las personas cuando debemos centrarnos en una labor o tarea y no distraernos, ya sea por causas internas (ideas o pensamientos que aparecen en nuestra mente) o externas (ruidos a nuestro alrededor).

Esto también es válido para personas adultas que se desplazan a su puesto de trabajo, la diferencia es que el resultado es inferior a niños y adolescentes, ya que durante las edades tempranas, la plasticidad del cerebro es mayor que en ningún otra etapa de la vida, lo que hace que este período sea el más favorable para impulsar la función cognitiva.


La investigación

Los investigadores detallaron un modelo que incluía a más de 1500 niños y adolescentes de entre 8 y 18 años de distintas ciudades de España.

Variables que los científicos tuvieron en cuenta:

  • Modo de desplazamiento al centro de enseñanza
  • Rendimiento cognitivo anterior a la investigación
  • Actividad física
  • Nivel socio-económico familiar
  • Tipo de centro de enseñanza (público o privado)
  • Nivel de estudios (primario o secundario)
  • Índice de masa corporal

La forma de desplazamiento al centro de enseñanza se logró empleando un cuestionario a los que se les preguntaba a los participantes, cuál es su modo habitual de asistir al centro educativo (caminando, auto, metro, autobús u otros medios) y el tiempo que demoraban en hacer el trayecto.
El nivel de aprendizaje cognitivo se evaluó aplicando un test de destrezas educativas. Dicho test mide la aptitud para seguir ciertos razonamientos, distintos niveles de operaciones matemáticas y la capacidad para leer lo más rápido posible.


Niñez, adolescencia… pero también adultos

Los autores del estudio determinaron que, durante la niñez y la adolescencia, la capacidad de la flexibilidad de adaptación del cerebro es superior que en ninguna otra etapa de nuestra vida, lo que hace que este período sea el más indicado para promover la función cognitiva.

Sin embargo, esto también es válido para adultos ya que una investigación similar realizada hace algunos años por la universidad de Ohio (Usa) con mayores de 25 años, llegó a una conclusión similar.

También es conocido por los investigadores que en muchas empresas de Japón es tradicional que, en mitad de la jornada laboral se hace una parada y obligan a sus trabajadores a realizar ejercicios físicos; estudios realizados en la ciudad de Osaka, aseguraron que los trabajadores después de realizar dichos ejercicios, tienen un mejor nivel en su capacidad intelectual.


...Para finalizar, se puede asegurar que las personas que no realizan ningún tipo de actividad física diaria antes de comenzar con sus estudios o trabajo (aunque sea caminar 15 minutos) se podrían estar perdiendo un estímulo muy importante para mejorar su capacidad cognitiva, intelectual y de una mayor productividad académica o laboral.